El caso Quiborax es el último de una larga lista de arbitrajes de inversión en los que Bolivia está inmersa, y que por el momento, con el resultado de 14 de ellos, ha costado USD 908,3M.
En este último, el Estado boliviano ha sido condenado a abonar USD 57M más intereses. En mayo de 2017 se llegó a un acuerdo con Abertis que implicaba el pago de USD 23M por la estatalización de Servicios de Aeropuertos Bolivianos (SABSA), que se suma al que previamente alcanzó con Iberdrola y Paz Holdings en 2015, por el que abonó USD 53,6M.
Todavía no han finalizado los procedimientos que tienen iniciados South American Silver, Glencore, Jindal Steel Bolivia y BP Investmen, en el que en total se reclaman USD 731,7M, por lo que el total finalmente abonado por Bolivia superaría con creces los USD 1640M. Solo la demanda de Glencore supone una reclamación de USD 300M.
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